"Estoy cansada de que me diga que no sirvo para nada"

LA PELEA DE TODOS LOS DIAS



Desde que viven bajo techo propio empezaron los problemas, todos los días discuten porque él llega malhumorado a la casa del trabajo y ella no entiende por qué, solo quiere mandarse mudar pero aún lo ama.

Hola licenciada hace tiempo que tenía ganas de escribirte, para ver si hay alguna esperanza para mi relación. El problema es que él y yo no nos entendemos. Nunca nos llevamos bien, discutimos por cualquier cosa y lo primero que hace es insultarme, quiere tener siempre la razón.
Hay veces en que siento que lo odio demasiado, pero otras en que lo quiero demasiado. Más de una vez se me ha cruzado por la mente escapar, hay veces en que me quiero ir corriendo de aquí con mi hijo, pero me quedo otra vez y aguanto, lloro, sufro y no sé qué hacer. La razón de todo es mi hijo y él le adora a su papá, y dentro de todo se que yo también lo sigo queriendo mucho.
Hace 5 meses que estamos viviendo como una verdadera familia, anduvimos como nómadas mudandonos de un lugar a otro. Vivimos 6 meses con mi mamá y 3 meses en la casa de sus padres, y ahora por fin tenemos nuestro propio ranchito. Nos conocemos hace 4 años, somos una pareja joven, él tiene 22 y yo 20 años.
Todo era lindo durante el embarazo pero después todo fue un infierno, se que le adora a su hijo pero nunca nos lleva a pasear o a la plaza, prefiere tomar con sus amigos o hacer cualquier otra cosa pero menos estar un rato en familia.
Yo le reclamo pero, él siempre quiere tener la razón y en vez de apoyarme, hace que parezca que la culpable de todos los problemas soy yo.
Todos los días me trata mal, pero llega la noche y todo cambia en él, parece que es el único lugar donde nos entendemos. Es un argelado últimamente, pero nunca me tocó, es una persona trabajadora y económicamente no nos hace falta nada. Nos peleamos porque, a veces él viene de su trabajo de mal humor y remata por mi, y yo no me callo de él, se plaguea o por que la comida no es como hace su mamá o llora la criatura o algo no le gusta, te digo que busca cualquier cosa para discutir.
Me dice que me quiere pero que no lo comprendo. Yo trato de hablar siempre con él pero, sale y me dice que no le importa lo que le diga y eso es lo que no me gusta que él no quiera dialogar conmigo.
Lo único que se limita a decir es que si estoy cansada que me vaya, y la verdad que estoy cansada de todos sus plagueos, de que todos los días me diga que no sirvo para nada, de eso estoy cansada pero a él parece que no le importa lo que yo siento. De todo hago para que esté o se sienta bien, pero a él no le importa a veces nomás llega de buen humor a la casa. A mi mamá, no le digo nada porque ella tiene muchos problemas luego y a la mamá de él le dije un vez que le hable a su hijo pero no hay caso luego me dijo.
Yo quiero dejarle pero pienso en mi hijo, y en el fondo también demasiado le quiero, y no sé qué hacer. Ayúdeme.


MARIZZA, DE ÑEMBY, 20 AÑOS.

"Me dice que me quiere pero que no lo comprendo. Yo trato de hablar siempre con él pero, sale y me dice que no le importa lo que le diga y eso es lo que no me gusta que él no quiera dialogar conmigo".

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RESPUESTA: Puede que la juventud, la inexperiencia y el grado de compromiso que ahora asumen con la llegada de un hijo les jueguen una mala pasada, pero si hay amor siempre hay esperanza de hacer algo para que la relación no se pierda.
Una vez que deciden convivir hay que tener en cuenta que son personas distintas, como dos mundos que se encuentran y deben buscar la manera de congeniar.
Cada uno tiene una historia personal y familiar diferente, único, una educación, valores y una forma particular de encarar los problemas, es todo un desafío caminar en una misma línea y valorar las cosas de la misma manera. Tal vez él llega cargado de preocupaciones y no sabe cómo hablar de ello porque nunca tuvo la necesidad de hacerlo, y vos tal vez estés sobrecargada con las responsabilidades de la casa que ya no tenés la misma paciencia para escuchar.
Siempre hay problemas en la casa o fuera, lo importante es saber cómo canalizarlos y no rematar por la pareja, ambos deben poner de su parte para hacer que el ambiente sea más agradable. Deberían tener objetivos comunes, fijarse en lo que tienen y cómo mejorar, darle sentido a la vida en común. No permitas que te maltrate en palabras, pero no le devuelvas agresión por agresión, sino con respeto hacele entender que el diálogo es fundamental y requiere práctica.

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