TENTACIONES

"Pillé las macanadas de
mi marido por su celu"


La tentación de revisar los mensajes de la medianaranja atormentan a una señora que cuando encuentra cualquier número extraño, anota para después llamar a pedirle que se deje de joder con el hombre casado. Al marido no le dice nada, prefiere llorar en silencio su rabia.



Necesito orientación. Mi marido tiene 51 años pero no deja de macanear, encuentro mensajes de mujeres en su celular y eso me deja mal, yo quiero que se deje de la macanada, pero siempre existe la tercera persona.
No puedo dejar de revisar el celular, no existen registros con nombres de mujeres, solamente los números, yo anoto, guardo y después les llamo a decirles que dejen de molestar a mi marido, que es casado, que tiene familia.
"Habiendo tantos hombres, dejen de molestarle a los casados, porque no se buscan uno sin compromiso", les digo y corto. Las que me atienden, me piden disculpas, pero a mi marido nunca le alzo la voz, nunca en 27 años de casados que ya llevamos juntos.
Nunca le reclamo, prefiero fingir y llorar en silencio, los mensajes que encuentro dan a entender encuentros y reencuentros dicen "Preparate para el lunes, aca no pasa nada y estoy muy necesitada". Yo creo que andamos bien en todo sentido, hasta en la intimidad, no le reclamo él tampoco, algunas veces no encontramos, pero preferimos más dormir, trabajamos mucho. A los 50 años uno ya no es como antes. Yo que estas mujeres le persiguen por plata nomás, mi marido trabaja bien, es chofer personal de una persona muy influyente actualmente.
Algunas veces de la rabia borro los mensajes, pero mi marido no me dice nada. Antes nunca tuvimos problemas, a veces le digo qué felices seríamos sin el celular, odio los celulares. El se enoja, me dice que no me faltar nada, tenes plata, tenés casa, me tenés a mi. Cuando le insinúo que yo se de sus mensajes, me dice "nde celosa jeytama", ahí ya me callo. Mi marido es un pan de Dios pero muy mañoso como un gato, es una persona agradable que le sobran amistades y por más que ya está viejo, no pierde su encanto con las mujeres, eso me molesta, pero aguanto todo en silencio.
Le suelo contar a mi hija y ella me dice que me tranquilice que son "despedidas" que ya se va a cansar de la novilleada, pero quiciera que desaparezca el celular de nuestras vidas.
Me considero una mujer excelente, nunca se va a quejar de mi mi marido, pero sí que lloro mucho, después se me pasa, a veces pienso que no debería darle tanta importancia, pero no se que hacer para no tocar el celular.
Me gustaría que sea santito que solamente me tenga a mi, que no existan otras en su vida. Pero ¿cómo hago con el celular?.


"Algunas veces quiero dejar de revisar, pero él llega del trabajo, baja sus cosas y no aguanto la tentación de agarrar".

"Por el celular yo le pillo todo, si es un número que no tiene nombre eso significa que es de una amiguita".

ESTELA, DE CAAPUCU, 50 AÑOS


RESPUESTA:
Guarda este mensaje en tu chip "Valgo mucho más que un aparatito insignificante", tenés que reducir ese impulso por controlar, eso se logra aclarando tus ideas. Hace bien hablar de los celos, pero creo que en realidad lo que te molesta es no estar en ese pequeño mundo íntimo de relacionamiento como se volvió el celular, en muchos casos "chatear" es un escape que las personas adoptan. No puedo poner la mano en el fuego por tu marido, pero ya es una exageración asegurar que todo número extraño es alguna cabezudeada, a veces se evidencian cosas, otras, uno malinterpreta. Para evitarte un desgaste emocional tenés que pensar que si lo único que logras con tu actitud posesiva es atormentarte tendrías que cambiar esos pensamientos de inseguridad. No basta con ser positiva, para cortar de raíz tenés que animarte a decirle que te hace mal y que de alguna manera él te ayude, no guardarte todo en silencio.

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