Dos corazones solitarios se juraron amor eterno
¦ Martes, 24 de Diciembre de 2013 »
Las fotos del casamiento de Estela y René, que fue en mayo de este año por la Iglesia Evangélica y el civil. - Ampliar
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La pareja comparte su linda historia de amor con los lectores en la víspera de Navidad
René Piro (41) y Estela Zaracho (49) volvieron a creer en el amor
gracias a Crónica. Súper romántica es la historia, se conocieron a
través del espacio “Corazones solitarios” que propició la linda relación
que terminó en casorio en mayo de este año.
Después de varios intentos por conocer a la mujer de su vida, un día René se animó a enviar su mensaje, temeroso, pidiendo una relación seria.
Las llamadas empezaron a lloverle de todos los rincones del país, de Ciudad del Este, Encarnación, Villarrica, pero ninguna le movió el corazón como cuando escuchó la voz de Estela.
Le dio como un py’a perere, una mezcla de emociones que lo empujaron a conocerla. René salía de otras historias de amor que terminaron cuando menos se lo esperaba, pero con ella tenía una corazonada diferente.
Ella dice que se animó a marcar el número porque le llamó la atención entre todos los mensajes publicados aquel día que se despedía con un “bendiciones”.
Siendo cristiana esta palabra la tomó como una señal de que al fin era el hombre indicado. Unos meses después él se paró frente a toda la familia de Estela, en la Nochebuena, a pedir formalmente la mano para casarse luego por la Iglesia Evangélica y por civil.
“Cuando la vi la primera vez me dije a mí mismo que esta sería la mujer de mi vida, y no me equivoqué, mi morocha es exactamente como yo le pedí a Jesús: una mujer que me quiere y me ayuda. Realmente volví a creer en el amor, me siento tan tranquilo. Dios sabe cuándo hacer las cosas, y todo a su tiempo”, contó.
Para el 2014 están con muchos planes, entre ellos tener la casita propia, y continuar por muchos años más siendo “felices y comiendo perdices”.
AGRADECIMIENTO
Como una forma de agradecimiento la pareja escribió una nota para compartir con su querido diario Crónica y los lectores el momento de felicidad que viven, ya que gracias a la publicación de “Corazones solitarios” fue que se conocieron, recuperaron la esperanza en el amor y hoy día están felizmente casados.
Después de varios intentos por conocer a la mujer de su vida, un día René se animó a enviar su mensaje, temeroso, pidiendo una relación seria.
Las llamadas empezaron a lloverle de todos los rincones del país, de Ciudad del Este, Encarnación, Villarrica, pero ninguna le movió el corazón como cuando escuchó la voz de Estela.
Le dio como un py’a perere, una mezcla de emociones que lo empujaron a conocerla. René salía de otras historias de amor que terminaron cuando menos se lo esperaba, pero con ella tenía una corazonada diferente.
Ella dice que se animó a marcar el número porque le llamó la atención entre todos los mensajes publicados aquel día que se despedía con un “bendiciones”.
Siendo cristiana esta palabra la tomó como una señal de que al fin era el hombre indicado. Unos meses después él se paró frente a toda la familia de Estela, en la Nochebuena, a pedir formalmente la mano para casarse luego por la Iglesia Evangélica y por civil.
“Cuando la vi la primera vez me dije a mí mismo que esta sería la mujer de mi vida, y no me equivoqué, mi morocha es exactamente como yo le pedí a Jesús: una mujer que me quiere y me ayuda. Realmente volví a creer en el amor, me siento tan tranquilo. Dios sabe cuándo hacer las cosas, y todo a su tiempo”, contó.
Para el 2014 están con muchos planes, entre ellos tener la casita propia, y continuar por muchos años más siendo “felices y comiendo perdices”.
AGRADECIMIENTO
Como una forma de agradecimiento la pareja escribió una nota para compartir con su querido diario Crónica y los lectores el momento de felicidad que viven, ya que gracias a la publicación de “Corazones solitarios” fue que se conocieron, recuperaron la esperanza en el amor y hoy día están felizmente casados.
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