"Ya iniciamos el divorcio pero él me pide una oportunidad"
LA
CRISIS DEL 7MO AÑO
Hace
unos meses que están separados, ya iniciaron los trámites del divorcio pero en
una de las visitas al hijo de ambos, él se quedó a dormir en la vieja cama
matrimonial.
Yo
no sé si nos tocó la famosa crisis del séptimo año o qué pero todo andaba mal
en mi matrimonio, teníamos un hijo y parecía que por él seguíamos aferrados a
la relación que de a poco se desmoronaba. Nos dimos un tiempo, yo conocí a una
persona y salíamos de manera discreta por mi condición de recién separada. Mi
marido hizo lo mismo, solo que él era más abierto, parecía querer que todo el
mundo supiera que era "un soltero recuperado".
Después
de un mes nos dimos cuenta de que nos extrañamos tanto, no podíamos estar el
uno sin el otro y nos reconciliamos. Pero al poco tiempo volvimos a caer en lo
mismo, las peleas por los mismos temas, que la casa, las cuentas, la criatura.
Ni corto ni perezoso, él empezó a salir de nuevo con sus amigas y yo, regresé
junto a mi paño de lágrimas, hasta que me cansé. No podía seguir así como si
nada con mi amante de día y de noche dormía en la misma cama que mi marido. Fue
así que nos separamos, pensé que sería ya definitivamente, iniciamos los
trámites de divorcio, acordamos martes, jueves y fines de semana que venga a
ver a los chicos así pasaron dos meses. El problema es que el fin de semana
pasado él se quedó a dormir porque ya era tarde y como vivimos en un lugar
donde a cierta hora ya no pasa colectivo no pensé que sería un error. Le
acomodé el sofá pero terminamos teniendo relaciones en nuestra vieja cama. Al
día siguiente él se vino con todas sus cosas como para instalarse de nuevo pero
yo le dije que no, que fue un error lo que pasó, sin estar seguros, por lo menos
que pensara en el niño. Mi hijo no entiende ya lo que pasa en la casa, un día
está papá y otro día "el tío"...tampoco se como hablarle porque es
muy pequeño, no quiero confundirlo más. Cuando le dije todo eso, me respondió
tan mal, como nunca, con rabia me dijo algo así como "¡mba´e la
reuseva!". Con lo que me sentía medio mal luego, me sentí peor, en fin me
dejó pero al llegar a la casa de su mamá donde se instaló, me llamó. Me rogó
que volvamos a estar juntos como una familia, que si todavía siento algo chiquitito
aunque sea por él que le de otra oportunidad y esa frase me tocó el alma. No sé
qué hacer, yo quiero ser feliz, tener una familia, pero tampoco puedo seguir
así como estamos. ¿Qué me aconseja?.
"Mi
hijo no entiende ya lo que pasa en la casa, un día está papá y otro día
"el tío"...tampoco se como hablarle porque es muy pequeño, no quiero
confundirlo más".
DIONICIA,
DE J.A. SALDIVAR, 27 AÑOS.
RESPUESTA:
Las crisis están para superarlas, no te des por vencida, estoy segura que con
calma y madurez tomarás la mejor decisión de tu vida. Analiza paso por paso y
sin apuro en cómo se dio la relación desde el comienzo hasta ahora, lo bueno,
malo, triste sin dejar de lado los momentos felices. Que sigan teniendo buenas
relaciones en la cama es señal de que aún existe química, pero hay parejas con
años de conviviencia que una vez separadas siguen manteniendo relaciones
íntimas por una cuestión de costumbre, más que de amor. Cuesta perdonar y
olvidar pero si aún existe ese amor que un día los unió, toca pelear por
reflotar ese sentimiento si es auténtico, no por un sentimiento de culpa.
Hacete esta pregunta: ¿Por qué no intentarlo?, la única condición es que ambos
estén dispuestos a realizar el mismo esfuerzo por estirar el carro, seguros de
que al dar el siguiente paso ninguno de los dos querrá dar marcha atrás. Si
deciden que sí hay un montón de acuerdos y materias pendientes que
replantearse. Si deciden que no, a buscar el modo de afianzar el rol de padres
y dejar que cada uno haga su vida, respetando los espacios y la cama
lógicamente.
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